Dispensador de hidromiel de barril a grifo
1. Barriles de hidromiel: La hidromiel se almacena en barriles metálicos convencionales, barriles corny y barriles con bolsa para mantener la frescura y la calidad de la bebida. Los barriles suelen ser de acero inoxidable, lo que garantiza la durabilidad y facilita la limpieza.
2. Conexiones y tuberías: Las conexiones y tuberías del sistema de dispensación de hidromiel deben estar hechas de materiales aptos para uso alimentario, como acero inoxidable o plástico de alta calidad. Estos materiales garantizan que no haya contaminación ni alteración en el sabor de la hidromiel.
3. Sistema de presurización: Para dispensar hidromiel desde el barril al grifo, se necesita un sistema de presurización, que suele utilizar dióxido de carbono (CO2) o una mezcla de CO2 y nitrógeno (N2) cuando el barril está en frío. La presión adecuada es esencial para mantener la carbonatación y la textura de la hidromiel.
4. Grifo dispensador: El grifo dispensador debe ser específico para la dispensación de hidromiel, con compensador de caudal que permitan un flujo controlado y uniforme de la bebida. Los grifos de acero inoxidable son ideales para este propósito, ya que son resistentes a la corrosión y fáciles de limpiar.
5. Refrigeración: La hidromiel debe servirse a una temperatura adecuada para mantener su sabor y calidad. Un sistema de refrigeración es necesario para mantener los barriles de hidromiel a la temperatura adecuada, lo que puede variar según el tipo de hidromiel y las preferencias del consumidor.
La instalación de un sistema de dispensación de hidromiel desde barril hasta el grifo implica conectar los componentes del sistema, como barriles, conexiones, tuberías, enfriadores, sistema de presurización y grifo dispensador. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante para garantizar una correcta instalación y funcionamiento. Es recomendable acudir a un servicio técnico especializado para garantizar una correcta instalación y servicio.
El mantenimiento del sistema de dispensación de hidromiel es esencial para garantizar la calidad y seguridad de la bebida. Esto incluye la limpieza y desinfección regular de las tuberías y grifos, así como la inspección y el reemplazo de las juntas y conexiones si es necesario. Además, es importante verificar y ajustar la presión del sistema de presurización y asegurarse de que el sistema de refrigeración funcione correctamente.
La dispensación de hidromiel es un método de servir hidromiel almacenado en barriles directamente a través de grifos. Este método es similar al utilizado para dispensar cerveza, cocktail y otras bebidas, y ofrece una forma conveniente de servir hidromiel en bares, restaurantes y eventos.
Los componentes clave en un sistema de dispensación de hidromiel incluyen el barril de hidromiel, las conexiones y tuberías adecuadas, el sistema de presurización (generalmente utilizando CO2 o una mezcla de CO2 y nitrógeno), el enfriador y el grifo dispensador.
La dispensación de hidromiel desde barril al grifo ofrece varias ventajas, como la reducción de residuos de vidrio, reducción de almacenaje, un menor impacto ambiental debido a menos empaques y una menor probabilidad de oxidación del hidromiel, ya que se mantiene en un ambiente presurizado y protegido del sol.
Aunque es posible utilizar grifos estándar de cerveza para dispensar hidromiel, es recomendable utilizar un grifo específico para hidromiel o vino, sin compensador de caudal ni filtros. Estos grifos están diseñados para manejar de manera adecuada las características únicas del hidromiel y mantener su calidad durante la dispensación.
Generalmente, se utiliza CO2 o una mezcla de CO2 y nitrógeno cuando el barril está en frío para presurizar el hidromiel en un sistema de dispensación con grifo. Estos gases ayudan a mantener la carbonatación adecuada del hidromiel y evitar su oxidación.
Al igual que con cualquier sistema de dispensación, es importante realizar un mantenimiento regular, como limpiar y desinfectar las tuberías, cabezales y grifos, así como verificar las conexiones y juntas. También es importante asegurarse de que el sistema de presurización funcione correctamente y mantener la presión adecuada para el tipo de hidromiel que se está dispensando.